WASHINGTON — El presidente electo Donald Trump está pasando la víspera de su investidura en una serie de eventos en Washington que celebran su regreso al poder y su movimiento “Hagamos Grande a Estados Unidos Otra Vez” mientras se prepara para volver a la Casa Blanca en un momento de profundas divisiones políticas nacionales.
Washington se ha preparado de maneras sin precedentes para mantener seguros y protegidos los eventos. Pero a diferencia de cuando Trump incitó a una turba de sus seguidores a atacar el Capitolio y trató de retener el poder en 2021 después de su derrota ante el demócrata Joe Biden, esta vez no se esperan grandes protestas, disturbios ni violencia. En cambio, la ciudad está preparada para multitudes que celebran el segundo mandato de Trump y el control total del Partido Republicano por parte de MAGA.
Es un cambio notable después de que Trump dejara la capital de la nación hace cuatro años en desgracia y se saltara la toma de posesión de su sucesor. Trump ganó las primarias presidenciales republicanas y ganó las elecciones de noviembre con un margen del Colegio Electoral no visto desde que el demócrata Barack Obama fue reelegido en 2012.
Sin embargo, incluso con esa cómoda victoria y su partido en control total, aunque estrecho, del Congreso, el presidente entrante sigue siendo una de las figuras más polarizadoras en la historia de Estados Unidos, con casi tantos detractores acérrimos como partidarios ardientes.